El plantel Sabalero llegó a Cañada de Gómez pero en la entrada en calor en el Florencio Varni se enteró que por una deuda mantenida con la AdC, la institución está desafiliada. Le queda una vida. Los jugadores evalúan la chance de abandonar el equipo. Crónica de una muerte anunciada.
La historia no es nueva. El 17 de octubre Colón arrancó la Liga “B” con una derrota en Cruce Alberdi ante Rosario Central por 97 a 59. El partido no debió jugarse porque el Sabalero no presentó la cantidad mínima de jugadores mayores que requiere la AdC. Los jugadores en éstos tres meses sufrieron problemas de todo tipo y remaron siempre contra la corriente.
Consiguieron un triunfo (a Brown SV el 20 de noviembre por 72 a 67). El pasado viernes los árbitros que pitaron ante Sportsmen (Barotto-Morano) no cobraron su arancel. El club tiene deudas por multas y no pagó el arancel correspondiente. El monto total asciende aproximadamente a $ 2.700.
La AdC intimó varias veces y no tuvo respuestas (boletines 15 y 16 que están en la página web). Por ende, dio la orden para que los jueces que debían pitar en el Florencio Varni (Vasallo-Saravalli) más el Comisionado Técnico (Ricardo Marini) no inicien el partido frente a Sport Club por desafiliación de la institución santafesina.
El plantel con Rubén Porta a la cabeza viajó y se enteró en el mismo rectángulo de juego. Al equipo le queda una vida más: la próxima no presentación automáticamente representará la pérdida de la categoría.
Fuente: www.marcapersonalonline.com.ar
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