Independiente volvió a ganar en casa pero no abrochó la clasificación

Independiente consiguió este viernes su sexta victoria de la temporada en la Liga Nacional B, superando por 82-76 a Alianza Viedma en el Duggan Martignoni, en uno de los encuentros de la penúltima fecha de la Zona Sur.
El triunfo le valió al rojinegro permanecer en lo más alto de su grupo, pero no le bastó para asegurarse la clasificación a la B1, objetivo que buscará el viernes en su visita a Hispano Americano de Río Gallegos.
Una vez más, los tandilenses debieron aguardar los segundos finales para terminar de asegurar la victoria, en parte por el flojo primer tiempo desarrollado ante un rival que no hizo maravillas pero sacó rédito de las carencias ajenas.
Fue un comienzo de juego para el olvido entre los dirigidos por Carlos Zulberti. Con una ofensiva muy trabada y padeciendo el porte de los internos rivales.
Apenas un doble consiguió el dueño de casa en los primeros 3’30”, situación que lo condenó a remar desde atrás en toda la primera mitad.
La visita se vio alertada sobre el poderío de Independiente y trabajó en función de ello. Entonces, Ruiz fue bien controlado en sus intentos de penetración y debió descargar al acercarse al cesto, los cortes frontales de Mateo fueron bien leídos y viéndose el necochense obligado a tomar un lanzamiento incómodo o bien a perder el balón y Andrizzi fue bien maniatado, tomando algunos tiros, pero incómodo, saliendo de las cortinas.
Del otro lado, entre Martirena y Brizuela comenzaron a dañar el juego interno rojinegro, llegando al gol y obligando la prematura acumulación de faltas personales de Arca y Romano.
Una racha de este último le había permitido al local no irse en una desventaja aún más grande al primer descanso (17-23).
A comienzos del segundo cuarto, Independiente entendió que defendiendo así no llegaría muy lejos y ajustó su juego en esa faceta, modificación que terminaría siendo efímera de cara al descanso largo.
En ataque, Andrizzi comenzó a tomar temperatura, tomando la posta dejada por Romano (debió sentarse por largos minutos) y Mateo se las ingenió para mantener su cuota de goleo, pese a sentirse incómodo entre la férrea marca de sus rivales y algunos fallos arbitrales que consideró injustos.
Una penetración finiquitada con bandeja de Rausch les permitió a los anfitriones irse al entretiempo apenas 4 puntos abajo (39-43), desventaja marcadamente decorosa dado lo inconsistente de su producción.
El vigoroso arranque de tercer cuarto que tuvo, fue la clave principal en el éxito rojinegro.
Dejando a Alianza Viedma casi 3’ sin anotar, el local redondeó un parcial de 10-0 que se inició en el cierre del segundo cuarto, y así tomó una ventaja tranquilizadora, pasando al frente por primera vez en el marcador.
Fue el cuarto menos prolífero para los patagónicos (12 puntos), combinado con el mejor de su rival en cuanto a goleo (23).
La tendencia le permitió al ganador ingresar a los 10’ postreros con un margen que, lejos de ser definitivo, se volvía tranquilizador (62-55).
Pero habría espacio para la reacción rionegrina. Hubo un buen ingreso de Rossi, que le cambió la cara a las ofensivas de su equipo, pero el principal responsable fue Mauricio Beltramella, autor de dos triples consecutivos que decretaron la igualdad en 64. Con esos argumentos y el dominio en el cristal ajeno, los de Bogliacino se permitieron llegar a un desenlace absolutamente cerrado.
También fue determinante que Independiente anotara apenas dos puntos en más de 5’.
Pero la respuesta llegó a tiempo. Y hubo una conversión que marcó un punto de inflexión. Con el electrónico nivelado en 69, Ruiz repuso de media cancha con apenas 2 segundos en el reloj de posesión y Mateo, tras recibir del bahiense, giró y clavó un tremendo triple que le devolvió la ventaja a su equipo.
Los tandilenses apretaron la marca en el perímetro y aseguraron su rebote defensivo sin permitir más segundas opciones. Con esas armas, alguna aparición más de Mateo y la injerencia de Arca a la hora de imponer su físico en la llave rival, Independiente llegó al minuto final con el partido prácticamente resuelto a la búsqueda de la diferencia que le diera la clasificación antes de la última fecha.
No cumplió ese objetivo, pero se regaló una nueva victoria en casa y se aferró al primer puesto de la zona, como en toda la temporada.
Síntesis
Independiente (82): Guillermo Rausch 7, Juan M. Ruiz (x) 11, Valerio Andrizzi 17, Leandro Mateo 23 y Alejandro Arca 5 (f.i.) Bruno Romano 11, Emmanuel Hartstock 6, Martín Trímboli 0, Eber Ferros Marina 2 y Ezequiel Barroso Basualdo 0. DT: Carlos Zulberti.
Alianza Viedma (76): Nicolás Paletta (x) 6, Mauricio Beltramella 13, Lucas Bianco 11,
Héctor Martirena 17 y Facundo Brizuela 9 (f.i.) Carlos De la Fuente 5, Mauro Bianco 7 y Augusto Rossi 8. DT: Guillermo Bogliacino.
Parciales: 17-23, 39-43 y 62-55.
Árbitros: José Luís Lugli – Rodolfo Daniel Gurman
Estadio: Duggan Martingnoni

Fuente: www.tandilbasquet.com.ar