Independiente pudo enderezar el rumbo

Una deslucida producción le bastó al rojinegro para superar al colista Los Indios de Moreno por 65-60, anoche en el Duggan Martignoni. Un parcial de 13-0 les permitió a los tandilenses revertir, en el último cuarto, una historia que venía mal barajada.
Independiente recuperó anoche el liderazgo de la B-2 Sur de la Liga Nacional B de básquetbol al superar como local a Los Indios de Moreno por 65-60, en uno de los encuentros de la tercera fecha de la segunda fase.
Una oportuna reacción le permitió al rojinegro mantener a salvo su invicto como local en la temporada, el cual se extiende a siete partidos.
El parcial de 13-0 en el cuarto epilogante trajo alivio para los tandilenses, que lejos estuvieron de mostrar su mejor faceta, pero terminaron sacando adelante un encuentro a partir de su sacrificio defensivo y el descomunal segundo tiempo de Leandro Mateo.
Las recurrentes equivocaciones -de decisión y ejecución-, distracciones por doquier y elementos individuales muy por debajo de su máximo nivel son aristas sintomáticas del momento que vive Independiente, arrastrando la frustración de no haber sido parte de la B-1 y la incertidumbre vivida en los últimos tiempos con el cambio de timón acaecido en el cuerpo técnico.
Por ende, una actuación en falso ingresaba en el terreno de lo previsible, la cuestión era dilucidar si sería suficiente. Y lo fue.
De entrada, al equipo de Macías el partido no le quedó cómodo. Y lo más ostensible se dio en el costado ofensivo, con escasa fluidez para hallar opciones de lanzamientos factibles. Fueron, en ese contexto, Ruiz y Arca quienes mayor protagonismo absorbieron en el inicio del juego. El primero de ellos precipitándose demasiado en sus ataques al cesto, y el interno haciéndose sentir con su aptitud para apoderarse del rebote defensivo y aportar en el otro costado.
El dueño de casa se llevó una pequeña ventaja (15-13), que no fue mayor básicamente por algunas distracciones en las inmediaciones del cesto, donde Greco causó mucho daño.
Al cabo del segundo capítulo, comenzaron a agudizarse los problemas de Independiente. La visita, sustentada en una ráfaga de Rodríguez, estableció un parcial de 9-2 y comenzó a edificar una diferencia con la que trabajaría hasta el último cuarto.
La ofensiva de Independiente lucía más trabada que nunca, y la desventaja (27-32) al momento de llegar al entretiempo no fue todavía más amplia porque Los Indios también incurrió en algunas irregularidades.
El local pareció volver renovado de los vestuarios, a partir del aporte de sus internos, Romano y Mateo. Sin embargo, su falta de consistencia en distintos aspectos lo condenó a seguir remándola desde atrás.
A poco de iniciado el último cuarto, los de Carlos Duro alcanzaron su máxima diferencia (48-55), fundamentalmente a partir de los cortes al canasto de Monier, dominando a Andrizzi en el uno contra uno.
Pero fue justo en ese momento que Independiente le puso un límite a la situación. Ajustó su defensa y del otro lado vio emerger a un Mateo inmenso.
Macías optó por colocar en prolongados pasajes a los tres bases en cancha y así Independiente ganó en traslado pero perdió gol perimetral, por lo cual Mateo se vio obligado a “sacar la cara” por su equipo.
La reacción fue vertiginosa y desembocó en un parcial de 13-0 que terminó siendo letal.
Un doble “Duncaniano” de Mateo, utilizando el tablero, le dio la ventaja a Independiente después de mucho tiempo (56-55) y a posteriori llegó un oportuno triple de Ruiz, que sirvió para tomar una distancia que trajo calma dado el escaso tiempo restante.
Los Indios se quedó sin gol y volvió a anotar cuando al partido le quedaba menos de medio minuto, a través de un triple de Espeche que reinstaló el suspenso (61-58). Más tarde, García ingresó en total libertad a depositar una bandeja y acercó a la visita a un doble (62-60). Andrizzi anotó 1/2 en su paso por la línea de tiros libres, dándole una nueva vida al rival.
Los visitantes necesitaban un triple para igualar, pero apostaron a una conversión rápida de dos puntos, que fue abortada por un tremendo tapón que Mateo le aplicó a Bertoglio, acción que terminó de sellar el destino de ambos conjuntos.
Independiente aseguró así una victoria por la que no hizo demasiado, necesaria para paliar su momento más tenso de la temporada.
Síntesis
Independiente (65): Guillermo Rausch 3, Juan Manuel Ruiz 11, Valerio Andrizzi 3, Bruno Romano 8, Alejandro Arca 7 (f.i.) Leandro Mateo 17, Martín Trímboli 3, Emmanuel Hartstock 6, Lisandro Caniza 7. DT: Marcelo Macías.
Los Indios (60): Gastón García 8, Leonardo Rodríguez (x) 11, Rodrigo Monier 18, Nicolás Mendyk 3, Nicolás Greco 10 (f.i.) Diego García Merlo 0, Julián Espeche 8, Eric Flor 0, Matías Bertoglio 2. DT: Carlos Duro.
Parciales: 15-13, 27-32 y 46-50.
Arbitros: Ricardo Casco y Gabriel Velasco.
Estadio: Duggan Martingnoni.

Fuente: www.eleco.com.ar